Mejillón

Los mejillones viven en colonias densas y se adhieren a sustratos duros, como rocas, muelles o boyas, utilizando unos filamentos llamados biso. Se alimentan filtrando agua y capturando partículas de plancton y otros organismos microscópicos presentes en ella.

Estos moluscos son ampliamente apreciados en la gastronomía debido a su sabor distintivo y su textura tierna. Son consumidos tanto en platos sencillos, como mejillones al vapor o en vinagreta, como en preparaciones más elaboradas, como paellas, sopas y guisos.

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Descripción

Mytilidae

El mejillón es un molusco bivalvo que se encuentra ampliamente distribuido en las costas de todo el mundo. Tiene una concha en forma de media luna compuesta por dos valvas, una más plana y otra más convexa, unidas por una bisagra. La concha suele ser de color negro o azul oscuro, aunque también pueden encontrarse variedades con tonos marrones, verdes o nacarados.

Los mejillones viven en colonias densas y se adhieren a sustratos duros, como rocas, muelles o boyas, utilizando unos filamentos llamados biso. Se alimentan filtrando agua y capturando partículas de plancton y otros organismos microscópicos presentes en ella.

Estos moluscos son ampliamente apreciados en la gastronomía debido a su sabor distintivo y su textura tierna. Son consumidos tanto en platos sencillos, como mejillones al vapor o en vinagreta, como en preparaciones más elaboradas, como paellas, sopas y guisos. Además, son una fuente de proteínas de alta calidad, minerales como el hierro y el calcio, y ácidos grasos omega-3.

El cultivo de mejillones en bateas o cuerdas suspendidas en el agua es una actividad importante en la acuicultura, ya que permite su producción en grandes cantidades y contribuye a la conservación de los recursos marinos. Además, los mejillones tienen un papel ecológico significativo, ya que ayudan a purificar el agua al filtrarla y contribuyen a la estabilidad de los ecosistemas costeros.